Muchas personas se inician en el mundo de la costura de forma autodidacta. Aunque al principio pueda parecer sencillo, a la larga puede generar un caos coser sin ayuda de un profesional.
Manejar correctamente los mandos de las máquinas de coser requiere tiempo, por esta razón vamos a explicar los errores más frecuentes que se suelen cometer para que no te suceda lo mismo.
Los fallos del principiante
Al realizar nuestro primer arreglo nos surgirán varias dudas, ¿Dónde debo hacer el corte?, ¿Qué patrón utilizo?.
Todas estas inquietudes son normales si es la primera vez que te pones frente a tu máquina de coser. Antes de plantearte esas posibilidades, debes familiarizarte con los mandos de tu máquina de coser.
Saber utilizar el pedal del prensatelas, dar las primeras puntadas o regular la tensión del hilo son el comienzo para dar el siguiente paso: comenzar a realizar tus propios diseños.
Tejidos mal cortados
Si ya tienes decidido el patrón que vas a utilizar, debes preparar la tela para cortarla antes de pasar las puntadas sobre ella. El tejido deberá estar completamente liso, ya que una arruga nos podría deformar nuestro corte.
Este es uno de los errores más frecuentes que suelen aparecer, al no estar estirado nos saldrá una deformidad en el resulto final.
Un consejo para que no te ocurra esto, es planchar la prenda antes de colocarla en la máquina de coser.
Problemas con el hilo
El hilo, es un material muy fino que hay que tratar con especial cuidado. Por esta razón deberemos fijarnos con frecuencia el estado del mismo. Si nos descuidamos un poco, podemos correr el riesgo de que el hilo se pueda romper, o lo que es peor aún, que se enrede con la tela.
Previamente debemos asegurarnos de tener bien ajustado la tensión del hilo, para no dar puntadas en vano.
Lo barato sale caro
La costura es un arte que requiere mucho tiempo de dedicación, por eso a la hora de comprar una máquina de coser no hay que escatimar los gastos. La máquina que elijamos debe ser de buena calidad, ya que es una herramienta que nos acompañará durante muchos años.
Aunque la inversión te pueda parecer alta, a la larga te darás cuenta que ha sido la mejor opción por el uso duradero que le has dado.
En cambio, productos low cost como las que ofrecen en grandes supercies como lidl, no tendrán tantas funcionalidades. Esto provoca que la variedad de nuestros diseños se quede limitada, además existe el riesgo de que surjan fallos técnicos con asiduidad y que tengamos problemas con las garantías.